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sábado, 1 de febrero de 2014

PROGRESAR, QUE NO ES POCO


Adhiero (y digo una obviedad) a TODOS LOS DERECHOS BASICOS que se necesiten para tener una vida digna. Pero hecha la ley, hecha la trampa.
Siempre se retorna a modelos que si bien fueron palitivos, creo que nunca la solución. Y si de lenguaje y subjetividad se trata, diría que los tiempos del PLAN TRABAJAR (para papà y mamà), la actualidad nos ofrece otra ADAPTACION PASIVA A LA REALIDAD* (a decir de Enrique Pichon Riviere): PROGRESAR, que remite a ¿futuro? joven/adolescente. O un presente contínuo con herramientas disponibles para la URGENCIA, pero no para lo IMPORTANTE.

Y lo importante sería poder futurizar, avizorar en un entramado de redes que hagan posible la inclusión y la inserción, desde el presente, y no con el temor de estar pensando que el Programa ó el Plan se cortan y se terminan. No se pagan a tiempo. Se atrasan. Se cruzan con otros planes y beneficios y después te quedás sin nada.
Y esto hace mella en la subjetividad de lxs sujetos. El trabajo organiza subjetivamente y es el eje ordenador fundante de la vida adulta, que empezó a gestarse desde la niñez.
La "subjetividad PLAN- PROGRAMA" Invoca a otra forma de SER y ESTAR en el mundo, menos protagonista de MI MISMO. ¿"Soy, porque el PLAN me hace"...?
Pero negociar con el monstruo capitalista que está en el closet de los grandes empresarios, parece una tarea dantesca, ergo, creación de fuentes de trabajo dignas para mucho papà y mamà adolescente. Porque después ¿habrá que saldar deudas e invocar un PLAN “¿MI MAMÁ ME MIMA MI PAPA ME AMA?”

¿Y como se podría construir, desde otro lugar de aprendizaje mas sano, en términos de adaptación activa, el retorno a la escuela, como un acto garante de la salud mental colectiva?.
Once mil millones de pesos para PROGRESAR. No está mal.

Pero yo quiero ver a mis pibes, a todos los pibes, no con la sonrisa dibujada. Porque los PLANES Y LOS PROGRAMAS tienen fecha de vencimiento. Y la vida sigue.
No sea cuestión que este concatenado de paliativos sea in eternum. Y después cerremos el ciclo con los “nietos del neo-neo-libero-capitalismo”.

Que cuando sean grandes, no quieran volver a ser niños por que la adultez aterra y genera INSEGURIDAD BASICA, quizá madre de todas las INSEGURIDADES...
Porque las responsabilidades sociales están en proceso de desguace.
Y eso produce mucho temor. Y el fantasma de la incertidumbre acecha.

Que se quiera volver a ser niño, niña, porque es una etapa sublime de disfrute, o debería serlo. Auque sea, por decreto.
Aunque sea por PLAN DISFRUTAR. Porque mamá y papá tienen y sostienen un buen trabajo. Y cuando se tiene un buen trabajo para parar la olla, lo demás viene de la mano. Creo humildemente que pueda ser asi. Y también y porque no, de otras maneras.

Hace años vengo laburando con pibas y pibes de barrios de Berisso.
Y muchos saben que no adhiero a ninguna politica partidaria ni la practico. La militancia a una bandera politica, a nuestra presidenta, a partidos políticos menos “mediátizados” es admirable en muchxs compañerxs por la garra que le ponen para intentar transformar. Pero a mi no me seduce. Tampoco me termina de cerrar.
Silvana Trotta

ADAPTACION ACTIVA- SALUD Y ENFERMEDAD
El dr. Enrique Pichon Rivière relaciona directa y fundamentalmente el concepto de adaptación con sus concepciones sobre la salud y la enfermedad mental, en cuanto diferencia un proceso de adaptación activa (salud) y un proceso de adaptación pasiva (enfermedad) a la realidad, proceso éste último también designado como alienación.
Adaptación pasiva: Pichon Rivière destaca la confusión que suele hacerse al homologar adaptación pasiva con curación. "En la práctica psiquiátrica, es frecuente observar que muchos pacientes son dados de alta tomando como índice de curación el hecho de que comen bien, se visten correctamente, etc., es decir presentan una conducta aparentemente 'normal', han llegado a construír un estereotipo con el cual se manejan en forma casi automática en su vida cotidiana. En este estereotipo, el médico, la familia y los allegados se integran como contexto. El sujeto puede comer, puede dormir, etc., pero no se dan en él modificaciones profundas, ni tampoco actúa como un agente modificador de su medio. Se convierte así en el líder alienizante de toda una estructura, merced a la situación de impostura grupal en la que impera la 'mala fe'".
Adaptación activa.- "El concepto de adaptación activa que proponemos es un concepto dialéctico en el sentido de que en tanto el sujeto se transforma, modifica al medio, y al modificar el medio se modifica a sí mísmo. Entonces, se configura una espiral permanente, por el cual un enfermo que está en tratamiento y mejora opera simultáneamente en todo el círculo familiar, modificando estructuras en ese medio (produciendo una desalienación progresiva del intra y del extragrupo)".
Pichon Rivière establece una fuerte vinculación entre adaptación activa y aprendizaje, definiendo a éste último como adaptación activa a la realidad. En efecto, "la adaptación activa a la realidad y el aprendizaje están indisolublemente ligados. El sujeto sano, en la medida en que aprehende el objeto y lo transforma, es decir, que hace ese aprendizaje operativo, se modifica también a sí mísmo entrando en un interjuego dialéctico con el mundo en el que la síntesis que resuelve una situación dialéctica se transforma en el punto inicial o tesis de una antinomia que deberá ser resuelta en ese continuo proceso en espiral".
La familia es el grupo primario donde comienza este proceso. Como indica Pichon Rivière, "la tarea del grupo familiar es la socialización del sujeto, proveyéndole de un marco y basamento adecuados para lograr una adaptacion activa a la realidad en la que se modifica él y modifica al medio, en un permanente interjuego dialéctico".

PAGINA 12: Extracto de nota VAMOS A LLEGAR A TODOS LOS JOVENES. 26/01/14

¿Cuáles son los ejes que se han trazado y la tarea que va a tener la Anses en la implementación del programa Progresar?
–Saldar una deuda que tenemos los argentinos con nuestros jóvenes, que como dijo la Presidenta “son hijos del neoliberalismo”, que no tienen trabajo y con una tasa mayor de desempleo con respecto al resto de la sociedad. Frente a este tema, en el que veníamos trabajando hace unos años, la Presidenta decide incorporar un nuevo derecho.

Foto: PROGRESAR, QUE NO ES POCO
www.expulsadadeleden.blogspot.com by Silvana.

Adhiero a TODOS LOS DERECHOS BASICOS que se necesiten para tener una vida digna. Pero hecha la ley, hecha la trampa. 
Siempre se retorna a modelos que si bien fueron palitivos, creo que nunca la solución. Y si de lenguaje y subjetividad se trata, diría que los tiempos del PLAN TRABAJAR (para papà y mamà), la actualidad nos ofrece otra ADAPTACION PASIVA A LA REALIDAD* (a decir de Enrique Pichon Riviere): PROGRESAR, que remite a ¿futuro? joven/adolescente. O un presente contínuo con herramientas disponibles para la URGENCIA, pero no para lo IMPORTANTE. 

Y lo importante sería poder futurizar, avizorar en un entramado de redes que hagan posible la inclusión y la inserción, desde el presente, y no con el temor de estar pensando que el Programa ó el Plan se cortan y se terminan. No se pagan a tiempo. Se atrasan. Se cruzan con otros planes y beneficios y después te quedás sin nada. 
Y esto hace mella en la subjetividad de lxs sujetos. El trabajo organiza subjetivamente y es el eje ordenador fundante de la vida adulta, que empezó a gestarse desde la niñez. 
La "subjetividad PLAN- PROGRAMA" Invoca a otra forma de SER y ESTAR en el mundo, menos protagonista de MI MISMO. ¿"Soy, porque el PLAN me hace"...?
Pero negociar con el monstruo capitalista que está en el closet de los grandes empresarios, parece una tarea dantesca, ergo, creación de fuentes de trabajo dignas para mucho papà y mamà adolescente. Porque después ¿habrá que saldar deudas e invocar un PLAN  “¿MI MAMÁ ME MIMA MI PAPA ME AMA?”                           

¿Y como se podría construir, desde otro lugar de aprendizaje mas sano, en términos de adaptación activa, el retorno a la escuela, como un acto garante de la salud mental colectiva?.
Once mil millones de pesos para PROGRESAR. No está mal. 

Pero yo quiero ver a mis pibes, a todos los pibes, no con la sonrisa dibujada. Porque los PLANES Y LOS PROGRAMAS tienen fecha de vencimiento. Y la vida sigue. 
No sea cuestión que este concatenado de paliativos sea in eternum.  Y después cerremos el ciclo con los “nietos del neo-neo-libero-capitalismo”.

Que cuando sean grandes, no quieran volver a ser niños por que la adultez aterra y genera INSEGURIDAD BASICA, quizá madre de todas las INSEGURIDADES...
Porque las responsabilidades sociales están en proceso de desguace. 
Y eso produce mucho temor. Y el fantasma de la incertidumbre acecha. 

Que se quiera volver a ser niño, niña, porque es una etapa sublime de disfrute, o debería serlo. Auque sea, por decreto. 
Aunque sea por PLAN DISFRUTAR.  Porque mamá y papá tienen y sostienen un buen trabajo. Y cuando se tiene un buen trabajo para parar la olla, lo demás viene de la mano. Creo humildemente que pueda ser asi. Y también y porque no, de otras maneras. 

Hace años vengo laburando con pibas y pibes de barrios de Berisso. 
Y muchos saben que no adhiero a ninguna politica partidaria ni la practico. La militancia a una bandera politica, a nuestra presidenta, a partidos políticos menos “mediátizados” es admirable en muchxs compañerxs por la garra que le ponen para intentar transformar. Pero  a mi no me seduce. Tampoco me termina de cerrar.
Silvana Trotta 

ADAPTACION ACTIVA- SALUD Y ENFERMEDAD 
El dr. Enrique Pichon Rivière relaciona directa y fundamentalmente el concepto de adaptación con sus concepciones sobre la salud y la enfermedad mental, en cuanto diferencia un proceso de adaptación activa (salud) y un proceso de adaptación pasiva (enfermedad) a la realidad, proceso éste último también designado como alienación.
Adaptación pasiva: Pichon Rivière destaca la confusión que suele hacerse al homologar adaptación pasiva con curación. "En la práctica psiquiátrica, es frecuente observar que muchos pacientes son dados de alta tomando como índice de curación el hecho de que comen bien, se visten correctamente, etc., es decir presentan una conducta aparentemente 'normal', han llegado a construír un estereotipo con el cual se manejan en forma casi automática en su vida cotidiana. En este estereotipo, el médico, la familia y los allegados se integran como contexto. El sujeto puede comer, puede dormir, etc., pero no se dan en él modificaciones profundas, ni tampoco actúa como un agente modificador de su medio. Se convierte así en el líder alienizante de toda una estructura, merced a la situación de impostura grupal en la que impera la 'mala fe'".
Adaptación activa.- "El concepto de adaptación activa que proponemos es un concepto dialéctico en el sentido de que en tanto el sujeto se transforma, modifica al medio, y al modificar el medio se modifica a sí mísmo. Entonces, se configura una espiral permanente, por el cual un enfermo que está en tratamiento y mejora opera simultáneamente en todo el círculo familiar, modificando estructuras en ese medio (produciendo una desalienación progresiva del intra y del extragrupo)".
Pichon Rivière establece una fuerte vinculación entre adaptación activa y aprendizaje, definiendo a éste último como adaptación activa a la realidad. En efecto, "la adaptación activa a la realidad y el aprendizaje están indisolublemente ligados. El sujeto sano, en la medida en que aprehende el objeto y lo transforma, es decir, que hace ese aprendizaje operativo, se modifica también a sí mísmo entrando en un interjuego dialéctico con el mundo en el que la síntesis que resuelve una situación dialéctica se transforma en el punto inicial o tesis de una antinomia que deberá ser resuelta en ese continuo proceso en espiral".
La familia es el grupo primario donde comienza este proceso. Como indica Pichon Rivière, "la tarea del grupo familiar es la socialización del sujeto, proveyéndole de un marco y basamento adecuados para lograr una adaptacion activa a la realidad en la que se modifica él y modifica al medio, en un permanente interjuego dialéctico".

PAGINA 12: Extracto de nota VAMOS A LLEGAR A TODOS LOS JOVENES. 26/01/14
¿Cuáles son los ejes que se han trazado y la tarea que va a tener la Anses en la implementación del programa Progresar?
–Saldar una deuda que tenemos los argentinos con nuestros jóvenes, que como dijo la Presidenta “son hijos del neoliberalismo”, que no tienen trabajo y con una tasa mayor de desempleo con respecto al resto de la sociedad. Frente a este tema, en el que veníamos trabajando hace unos años, la Presidenta decide incorporar un nuevo derecho.

http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-238523-2014-01-26.html
 

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