DOSMILTRECEQUENOESPOCO

Dos mil trece, Si me vas a dar un turno para el balance de estos últimos trescientos sesenta y cinco días, que no sea justo, justo, pero justo a media noche.
No quiero salir en los noticieros amarillo patito junto con el primer Rapibolúdico Meteórico en llegar a Mardel a las 0.00 horas.
O el/la primer bebé arrojado al mundo el 2014, a la hora señalada, para la foto.

Si me vas a pasar factura, que sean de manteca.
Con media docena estamos a mano. Y ya llevo aumentados cuatro kilos y prometidos para bajar otros tanto: Balance: CERO
Más: sería adicción.
Menos: anorexia.
Igual: me persigue ARBA por no estar al día con el monotributo anual.

Almanaque viejo, si me vas a dar turno, que el balance mejor te lo haga mi contador de sueños. Y que te haga recibo "C" por la foto duplicado que tengo de cuando era nena y le daba de comer a las palomas de la plaza.

Añoqueyatestásyendo, mejor olvidate de mi. No se si te quise. Se que de a ratos te ame por todo lo que me ayudaste a cosechar.
De a ratos me enoje con vos. Porque que si. Porque un día descubrí que todavía podía hacer algo para estar completamente viva antes de estar definitivamente muerta.

Entonces, en ese instante, me puse en movimiento.
Y decidí brindar. Con los que están. Con los que estuvieron. Por los que estan y los que estuvieron. Por los que dejaron huellas.
Brindo por trescientos sesenta y cinco días de MOVIMIENTO.
SALUD Y PAZ.
El resto viene de la mano de ellas dos. No me la sueltes. No te la suelto...